Por Abel Segura
La experiencia recogida durante los más de diez años que llevo impartiendo clases de ajedrez me ha hecho tomar la decisión de escribir este libro, cuya finalidad es que pueda ser utilizado por niños/as en edad escolar para que ellos mismos puedan establecer un plan de estudio de la materia.
Se viene demostrando que a tempranas edades no es conveniente tratar de abarcar demasiada materia y mucho menos que ésta se memorice, pues los niños no la asimilan y se les crea confusión. Conviene, por tanto, ir avanzando poco a poco para asentar sus conocimientos pues, una vez adquiridos, será
difícil que los olviden.
Por ello, la enseñanza del ajedrez ha de ir encaminada hacia el pensamiento y el razonamiento y no hacia la memorización. Hemos de enseñar a que se conserve poco en la memoria, pero que lo que retengan los niños sepan aplicarlo posteriormente a la práctica, pues en caso contrario lo aprendido, resultará de escaso provecho.
El libro también puede servir de guía para profesores que se inician en la enseñanza del ajedrez en las escuelas.
Está estructurado a base de ejercicios instructivos para que los niños puedan ir resolviendo casos prácticos.