El desarrollo de la intuición en el ajedrez se puede lograr principalmente de dos maneras, la manera fácil de mejorar la intuición en ajedrez es a través del reconocimiento de patrones básicos, esto se produce principalmente a través de la experiencia, por ejemplo, si has estudiado o jugado la Variante Najdorf de la Defensa Siciliana vas a ser muy cauteloso de permitir que el blanco ocupe la casilla crítica d5 con una pieza, el cerebro puede desarrollar un tipo paralelo de la memoria muscular.
El reconocimiento de patrones permite al cerebro ahorrar tiempo y energía en casi todas las funciones cognitivas, y esta regla se aplica especialmente en el ajedrez, donde el número de patrones está limitado por 32 piezas en 64 casillas. Cada partida de ajedrez que juegas o estudias contribuye al reconocimiento de patrones y por lo tanto debe seguir desarrollando tu intuición en ajedrez.
Aprender de los Campeones del Mundo
El reconocimiento de patrones es eficaz, pero simplemente no se puede experimentar un crecimiento significativo con respecto a la intuición en el ajedrez sin tener que trabajar duro para mejorar tu comprensión profunda de posiciones en ajedrez. Por ejemplo, es fácil de recordar por qué no quieres tener tus peones en casillas del mismo color que tu alfil en un final. Pero es mucho más eficaz si has puesto en el trabajo duro y el estudio la razón detrás de esta regla. Echemos un vistazo a una partida clásica del combate por el Campeonato Mundial de Ajedrez de 1984 entre Anatoly Karpov y Garry Kasparov. En esta partida número nueve, Karpov demuestra de forma perfecta el poder de su comprensión posicional y la intuición en el ajedrez mediante la aplicación de una presión constante en la apertura para lograr una iniciativa peligrosa en el del medio juego y el final. Partida profunda de Karpov y con un Kasparov defendiéndose constantemente, lo que resultó en la siguiente increíble táctica posicional :
Aquí la intuición de Karpov le hizo jugar 44. Axf5! Axf5 45. Ce3 Ab1 46. b4!? gxh4? 47. Cg2!!
Después de 44. Af5! Karpov ha logrado una gran ventaja a largo plazo con un buen caballo contra un mal alfil. En una posición de igualdad material con muy pocas piezas sobre el tablero, Karpov sacrifica un peón para abrir un nuevo frente a sus piezas para atacar. Sin una inmensa imaginación y una afinada intuición en ajedrez, no hay manera de que pudieras considerar 47. Cg2!!, Karpov ganó este final manera muy impresionante.
El ejemplo anterior ilustra perfectamente por qué es tan importante reconocer la importancia de la comprensión profunda, posicional y la intuición en el ajedrez. Este mismo concepto se puede aplicar a cualquier etapa o faceta del juego, como no abrir la posición, mientras que su rey está en el centro o de forma automática en busca de combinaciones basadas en piezas sin protección de su oponente. El desarrollo de la intuición en el ajedrez mejora la columna vertebral de su juego, abrir los ojos a nuevas ideas que no se han considerado con anterioridad.
Pero realmente ¿qué es la intuición?
Es la facultad de comprender las cosas al instante sin necesidad de un razonamiento previo. En el Ajedrez es la capacidad de orientarse rápidamente sin necesidad de un razonamiento adecuado; es olfatear al instante la mejor opción sin necesidad de un cálculo precedente…sólo dejar que el instinto mueva nuestras manos para realizar la jugada correcta.
La intuición del ajedrecista es una facultad que no puede ser fundamentada racionalmente y que resulta difícil explicar después de ejecutada la idea. Es el producto de una integración en nuestra mente y a un nivel puramente subconsciente, del conocimiento, la práctica y la experiencia.
José R. Capablanca, Boris Spassky y V. Anand son ejemplos fehacientes de grandes jugadores intuitivos, los cuales tenían la capacidad de encontrar le mejor opción práctica sin consumir mucho tiempo en el cálculo y por ende en el reloj.
Mijail Botvinnik, ex-Campeón Mundial y padre de la Escuela Soviética de Ajedrez, consideraba a Capablanca como el mejor jugador de todos los tiempos por su grandiosa intuición, la cual le permitía orientarse rápidamente en cualquier posición sin realizar grandes cálculos.
Dice Anand que la intuición le enseña la primera jugada que el ve y a partir de entonces, el comprende y encuentra la esencia de la posición.
Según el GM Adrián Mikhalchishin – un estudioso de este tema- que la intuición de Spassky era tan efectiva que sus rápidas evaluaciones posicionales casi siempre resultaban correctas.
El ex-Campeón Mundial Vasily Smislov decía que su juego no dependía solamente de sus conocimientos y capacidad de cálculo, si no, “más que todo, dependía de su intuición, que le permitía evaluar acertadamente y con profundidad la posición”.
Mikhalchishin plantea que la intuición puede ser desarrollada por jugadores de todos los niveles a través de un trabajo arduo de estudio y que entre más lo acumule, mejor será la capacidad para fortalecerla y asimismo, dice que el primer signo de un talentoso ajedrecista es la intuición.
Si quieres saber más sobre la intuición en ajedrez te recomiendo el libro “Desarrolla la intuición en ajedrez” de Manuel López Michelone de Editorial Chessy.